Durante las sesiones, el o la paciente puede lograr avances en los problemas emocionales que quiera resolver, lo que más tarde se traducirá en una mejoría en varios aspectos de la vida como, por ejemplo, en las relaciones sociales, afectivas, la prosperidad económica y, en definitiva, la salud física y mental.

Hay que tener en cuenta que todo trabajo personal y proceso de sanación, para que sea realmente efectivo, requiere una conexión verdadera con la profundidad del ser. Para esto, es necesaria la aceptación e integración tanto de lo “bueno” como “malo” presente en nosotros mismos y en todo lo que nos rodea. A esta actitud la llamamos “actitud plateada” y es la base que permitirá sanar, amarse a sí mismo, a otros y disfrutar de la existencia.

Adaba integra una mirada espiritual y consciente de la vida que se traduce en cambios reales y que logra que sus pacientes puedan sanar temas de muy largo tiempo, incluso de vidas anteriores, de manera integral, profunda.